Un caso de extrema gravedad, en el marco de una emergencia médica, se registró esta tarde por las calles marplatenses.
Un policía protagonizó un demencial raid esta tarde cuando, con el afán de llevar a su convulsionante sobrina al hospital Materno Infantil, secuestró a una embarazada, la obligó a llevarlo y le disparó a otros automóviles que no se corrían de su camino.
El efectivo policial, que cumple funciones en la localidad de Ayacucho, había llegado a Mar del Plata a visitar a su hermana y en esas circunstancias se produjo la emergencia en la que, según fuentes judiciales, “perdió absolutamente la cabeza y aún no es entendible cómo no provocó una tragedia”.
De acuerdo a las fuentes consultadas, el policía fue detenido en la puerta del Hospital y acusado de “privación ilegal de la libertad triplemente agravada y abuso de arma”.
En tanto, se supo que la niña de solo 3 años se encuentra en buen estado de salud y que las convulsiones obedecieron a un cuadro febril.
Por otra parte, la mujer que fue privada de su libertad cursaba un embarazo de alto riesgo y sufrió un desmayo por lo que debió ser asistida.
El inverosímil episodio se inició esta tarde en Bosch y Carasa en una vivienda a la cual había arribado de visita un policía de la localidad de Ayacucho. Allí vive su hermana con una pequeña hija de 3 años, quien repentinamente comenzó a convulsionar.
El policía, que andaba a pie, salió a la calle e intentó detener algún automóvil pero nadie frenó. Entonces extrajo su arma reglamentaria y apuntó al primer vehículo que pasó, un Peugeot 208 que tenía como conductora a una mujer en estado de embarazo.
Según trascendió, el policía quiso hacer bajar a la mujer pero al negar ésta, llamó a su hermana y la hizo subir en el asiento trasero, donde además iban otros cuatro menores. El policía ocupó el lugar de acompañante y ordenó a la embarazada a dirigirse a toda velocidad hacia el Materno Infantil.
A pocas cuadras de allí, en Bosch y 39, como otros automóviles bloqueaban el camino comenzó a abrir fuego y uno de los proyectiles impactó en una camioneta Renault Kangoo en la que se encontraba un matrimonio confirmado por un hombre y otra embarazada.
En el trayecto hasta el Materno Infantil mantuvo amenazada a la mujer del Peugeot pero no se reportaron nuevos incidentes. Pero en Matheu y Santa Fe fue detenido por la policía. Los patrulleros escoltaron al auto hasta el hospital.
Al llegar al nosocomio la embarazada sufrió un desmayo, en el mismo momento en que el policía corrió para llevar a su sobrina a la guardia.
El fiscal de turno Fernando Castro, una vez conocido el caso, se dirigió al Hospital donde ordenó la detención del funcionario policial.